24-04-2008

Liza Casabona
WWD.COM
Traducción de RSM

WASHINGTON - El Movimiento Laboral organizado presentó un reclamo, el primero en su tipo, ante el Departamento de Trabajo el miércoles, el cual es visto como un barómetro para medir cuán efectivas son las disposiciones laborales en los tratados de libre comercio.

La petición de la AFL-CIO fue presentada en la Oficina de Asuntos Comerciales y Laborales [Office of Trade and Labor Affairs]. Es la primera presentada bajo los términos del Tratado de Libre Comercio de América Central (CAFTA por sus siglas en inglés), que requiere que los países miembros hagan cumplir sus propias leyes laborales.

Las acusaciones del sindicato se refieren a cinco casos en Guatemala de hace dos años, en las cuales la AFL-CIO acusa que el gobierno no protegía los derechos de los trabajadores, incluyendo dos fábricas de confecciones y una en el puerto. El reclamo está dirigido al gobierno de Guatemala, no a las empresas individualmente. El presidente de Guatemala estará la semana que viene en los Estados Unidos como parte de una visita de Estado.

La Oficina de Asuntos Comerciales y Laborales tiene 60 días para aceptar o rechazar el reclamo, dijo Thea Lee, directora de políticas en la AFL-CIO. Si la petición es aceptada el gobierno iniciaría consultas con el gobierno guatemalteco para solucionar el problema. Si las consultas no funcionan, se entraría a procedimientos formales de resolución de conflictos.

Si el problema no se resuelve con este método, se podría imponer a Guatemala una multa de hasta 15 millones de dólares. La multa se pagaría a un fondo que se gastaría en Guatemala y destinado a mejorar las condiciones laborales. Si no se paga la multa entonces habría posibilidades de sanciones bajo los términos del CAFTA, dice Lee.

"El Departamento de Trabajo revisará e investigará exhaustivamente estas acusaciones dentro de los parámetros establecidos en el tratado CAFTA. Los tratados de libre comercio, como el CAFTA, disponen de un mecanismo de manera que el gobierno de los Estados Unidos pueda tratar con acusaciones de esta naturaleza," dice Charlotte Ponticelli, subsecretaria adjunta de Asuntos Laborales Internacionales.

La administración Bush nunca le ha dado seguimiento con algo de persistencia o vigor a caso laboral alguno. Esperamos que esta vez sea diferente," dice Lee de la AFL-CIO.

El reclamo tiene relevancia para el debate alrededor del tratado de libre comercio con Colombia, dice Lee, pero no es por eso que se interpuso la demanda. Sin embargo, el caso ayudará a mostrar cuán efectivo es el capítulo laboral en asegurar que se protejan los derechos laborales, señala. Las protecciones laborales han estado en el centro de algunos de los argumentos sobre los pro y los contra del acuerdo con Colombia en las últimas semanas.

El reclamo contiene ejemplos detallados de cómo cree el sindicato que el gobierno de Guatemala violó sus propias leyes laborales al permitir la violencia física contra sindicalistas y las violaciones a los derechos de libertad de asociación y negociación colectiva que siguen ocurriendo. El reclamo acusa también que los trabajadores no tuvieron acceso a recursos legales ni administrativos justos y expeditos.

El reclamo acusa que "en ciertos aspectos importantes, las condiciones laborales no han cambiado y/o mas bien han empeorado desde que se ratificó el tratado de comercio CAFTA." El tratado entró en vigencia en julio de 2006.

La AFL-CIO detalla ejemplos de trabajadores que fueron despedidos de Avandia S.A., una fábrica de confecciones en Ciudad de Guatemala que fabricaba prendas para Jones Apparel Group, por tratar de establecer un sindicato. Otro ejemplo tiene que ver con una empresa de propiedad surcoreana, FRIBO S.A., a la que se acusa de cambiar de razón social para evitar la sindicalización. Fribo hacía prendas para tiendas como Kohl's y Dress Barn.

Jones y Dress Barn declinaron comentar. Kohl's no pudo ser localizada para este artículo.

Julia Hughes, vicepresidente senior de comercio en la Asociación Estadounidense de Importadores de Textiles e Indumentaria, dijo que le sorprendía escuchar que Guatemala era el país mencionado en el reclamo y de que la situación comercial entre los EE. UU. y Guatemala era muy diferente de la que se da con Colombia.

"Suena un poco como que es una acción política," dijo.

El sindicato dijo que su posición está guiada solamente por una situación que llevan monitoreando desde hace algún tiempo.

"Los trabajadores guatemaltecos están siendo señalados por su actividad sindical," dijo el presidente de la AFL-CIO, John Sweeney. "Sin sentirse libres del miedo a incorporarse a sindicatos y negociar colectivamente, ¿cómo podemos esperar que algún trabajador se beneficie con un tratado de libre comercio?"