03-06-2010

La huelga de tres días que sostuvieron las y los trabajadores de la planta de autopartes de Johnson Controls en Puebla, México, apoyada por una campaña internacional de solidaridad, logró que las y los trabajadores ganaran su derecho a ser representados por un sindicato de su libre elección.

La planta de interiores de Johnson Controls emplea alrededor de 450 trabajadores/as y produce partes para asientos para las principales compañías de autos en el mundo, incluyendo a Ford y Mercedes-Benz.

El 29 de mayo, representantes de las y los trabajadores en huelga y de la empresa firmaron un acuerdo que reconoce la decisión de los trabajadores de ser representados por el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSSRM o "los Mineros".)

Un sindicato de protección controlado por la empresa y vinculado al gobierno estatal del PRI tenía la titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo de la fábrica, pero los trabajadores/as nunca habían recibido una copia del contrato ni habían sido consultados sobre si querían ser o no representados por ese sindicato.

Un acuerdo que sienta precedente

El acuerdo firmado sienta un importante precedente en México, en donde los empleadores frecuentemente firman "contratos de protección" con sindicatos corruptos sin el conocimiento y/o consentimiento de las y los trabajadores, para prevenir que los mismos se organicen o se afilien a un sindicato democrático.

Además de reconocer al sindicato de los Mineros como el sindicato de los trabajadores/as, el acuerdo también incluye las siguientes disposiciones:

• No habrá represalias en contra de los trabajadores/as que participaron en el movimiento;
• No se iniciará acción legal alguna en contra de aquellos/as que participaron en la huelga;
• Se pagarán los salarios completos a los trabajadores/as por el tiempo que duró la huelga;
• Se hará un pago equivalente a $100 US dólares a cada trabajador/a por concepto de reparto de utilidades (20 veces mas que los originales $60 pesos que la empresa les ofreció, equivalente a $5 US dólares), y
• Se ofrecerá contratación directa y membresía al sindicato para todos los trabajadores/as que actualmente estén empleados por una empresa de empleo subcontratado.

En México, los trabajadores/as recibieron apoyo del Centro de Apoyo al Trabajador (CAT) de Puebla, de la oficina en México del Centro de Solidaridad de la AFL-CIO y del Proyecto de Derechos Económicos Sociales y Culturales (ProDESC). Entre las organizaciones que movilizaron la solidaridad internacional estuvieron el Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos de Canadá (USW, por sus siglas en inglés), el Sindicato de Trabajadores de la Industria Automotriz de Canadá (CAW), el Sindicato de los Trabajadores de las industrias Automotriz, Aeroespacial y Maquinaria agrícola de América (UAW), el Proyecto de Solidaridad Laboral en las Américas (USLEAP), la Federación Internacional de Trabajadores del Metal (IMF) y la Red de Solidaridad de la Maquila (RSM).

Continúa la disputa en la planta de FINSA

Mientras tanto, continúa la larga disputa en la planta de FINSA, también en Puebla, en donde las y los trabajadores están intentando deshacerse de otro "sindicato de protección".

Los trabajadores/as de esta fábrica han formado una Coalición Temporal de Trabajadores para negociar con la compañía. A la fecha Johnson Controls se ha rehusado a reconocer o negociar con la Coalición y ha despedido a muchos de sus líderes.

El 28 de abril, mientras dos miembros del equipo del CAT (Enrique Morales Montaño y Coral Juárez Melo), que apoyaban a las y los trabajadores de Johnson Controls, visitaban a trabajadores en la comunidad de Santo Toribio, Tlaxcala, uno de ellos, Enrique, fue atacado físicamente por el hijo de 17 años de Magdaleno Texis, un líder local de la CROM, el sindicato corrupto que tiene firmado el contrato de protección con los gerentes de la planta FINSA.

Construyendo la solidaridad internacional

Algunos de las y los trabajadores de FINSA actualmente están realizando una visita por varios lugares de los Estados Unidos, buscando la solidaridad con su lucha por lograr ser representados por un sindicato independiente.

La RSM se ha unido a las organizaciones contrapartes en México e internacionalmente para hacerle un llamado a la compañía a que se reúna con la Coalición de Trabajadores de Johnson Controls, re instale a las y los trabajadores que fueron despedidos injustificadamente y apoye la independencia del sindicato, respetando el derecho de los trabajadores/as a ser representados por el sindicato de su libre elección.