21-09-2007

A pesar de la creciente presión sobre el gobierno filipino para que ponga fin a la violencia y asesinatos extrajudiciales de sindicalistas y activistas de derechos humanos, los ataques continúan. Alrededor de la medianoche del 6 de agosto, huelguistas en la fábrica Phils Jeon Garment, en la Zona de Manufacturas para Exportaciones de Cavite, fueron sorprendidos por diez hombres enmascarados. Según el testimonio de los trabajadores, las mujeres huelguistas fueron atadas y con una venda en los ojos fueron cargadas en un camión. Los atacantes desmantelaron las tiendas de campaña y cargaron todo en el camión. Las trabajadoras fueron luego dejadas afuera de las puertas de la Zona en Cavite. El Rev. Fr. Jose P. Dizon, director ejecutivo del Centro de Asistencia al Trabajador, cree que los ataques están aprobados por la Autoridad de la Zona Económica Filipina y su fuerza policial. “Hasta ahora, la autoridad no ha realizado acción alguna sobre la solicitud de investigar cómo fue que en esos días del 10 y 11 de junio los hombres armados y enmascarados pudieron entrar en la Zona de Exportaciones que está fuertemente custodiada. Y ahora otro ataque similar les sucedió a los huelguistas de Phils Jeon Garment,” se lamentó Dizon.